Acabaron el sábado 16 las Fiestas y al día siguiente salía casi corriendo de peregrinación... Después de pasar un tiempo entre mis amigos de siempre casi olvido que dónde realmente me siento pleno y feliz es entre mi "nueva familia de la fe"... y, es que, realmente, cuando experimentas que Jesucristo llena, lo demás te sabe a poco, aunque a veces tiendas a "tentar" y parece que te olvides...
El domingo por la noche salimos de Valencia 150 jóvenes de distintas parroquias, junto a 5 sacerdotes. Además 4 Seminaristas del Seminario Mayor, 2 del Seminario Menor, (más 3 que lo serán si Dios quiere en Septiembre) más uno del Seminario Misionero "Redemporis Mater"
Durante la semana estuvimos en varios lugares santos. En Lourdes coincidimos con el "Año Jubilar" y el 150 aniversario de las apariciones de la Virgen.. Para mí fué el día más duro... llevaba sueño atrasado, dolor de cabeza... y no iba con buena predestinación.. muchísima gente, tiendas, tumultos... Aunque finalmente el Señor me hizo el tremendo regalo de poder disfrutar de una noche de oración magnifica ante la Gruta de la Virgen... Solo a solas... Renovando mí "sí", mi "hágase".
De allí pasamos a Javier (+visita de los "semi-boy's" a las Oblatas), después al día siguiente hicimos una caminata por la montaña en Potes, de camino para ir a venerar la Vera Cruz en Santo Toribio de Liébana, de allí a Oviedo, visitamos la Santina y pudimos contemplar el reduccionismo cristiano en los tiempos de la reconquista, y como quedaron muy pocos cristianos en toda la Península.. (no sé de que nos asustamos ahora) Pasamos dos día en el Seminario de Oviedo y de allí fuímos hasta Ávila, a la Tierra de la Santa Madre Teresa de Jesús, dónde no nos pudimos perder el Chuletón, ni el encuentro con las M.M. Carmelitas del Monasterio de la Encarnación, que fué tremendo i nos dieron la clave "O Santos, o muertos"... (La crónica completa en Todo lo tenía en común)
Realmente ha sido un tiempo de gracia, es una pasada vivir entre cristianos, con un mismo pensar y un mismo sentir... Pero hay que recordar que eso no es todo, sino que uno debe recordar y renovar su fidelidad todos los días...
Ha sido maravillos poder ser testigo de como el Señor va llamando a algunos de sus cristianos para misiones concretas... en la vida matrimonial, en la consagrada, en la contemplativa, en la sacerdotal... Pero no basta sólo el primer "sí"... sino que el sí de la Anunciación se debe renovar todos los días... Hasta el "sí" del pie de la Cruz...
Es una gracia ser observador de los "sí" de la Anunciación... Pero, por experiencia, sé que ése queda, y que hay renovarlo todos los días... Guardándolo en el corazón...
6 comentarios:
Que envidia! bueno con el fin de las vacaciones espero que vayas escribiendo mas a menudo porque ya te vamos echando de menos.
Gracias por las fotitos. Seguro que ha sido una peregrinación muy fructífera.
me uno a lo que dice Carlos: que envidia! disfrutad. sin duda por lo que nos cuentas ha sido un viaje muy hermoso.
muy bien, pero... al final son las "grandes" cosas, sean lo que sean: ser los "semis-boys", ir de..., hacer de..., visitar a... lo que sostienen y sustentan nuestra fe y nuestra vocación, y tal vez sean "cosas" de Dios, pero no son Dios.
Ya me alegra que lo hayas pasado bien y hayas disfrutado y aprovechado esos días. Me das un pelín de envidia (de la sana), ya me gustaría a mí andar por aquellos santos lugares. Hace años que estuve en Santo Toribio de Liébana, era yo muy pequeño, y apenas recuerdo nada… pero sí tengo en mi mente la imagen de una enorme plaza donde se encontraba la Iglesia… ¿puede ser? También recuerdo unas estampas que nos dieron con una cruz y algo rojizo en el centro… Eso es lo único que recuerda mi mala memoria… Me tocará volver a hacer una visita por allá :P
Un abrazo.
hola, yo me uno a lo que dice anonimo de que muchas veces ocultamos a ese dios, que aunque nos haga sufrir y aunque estemos negendonos a nosotros mismos, es un Dios muy idealizado y lo temos escondidas en esas cosas santas que posiblemente no sean tan santas. no encontramos a cristo iendo de peregrinacion sino en lo oculto de nosotros mismos y en el supuesto silencio de Dios alli esta. Animo y no decaigas nunca en esa busqueda que cuando ya te hayas cansado el te encontrara a ti y seguro que menos idealizado de lo que pensabas. un abrazo
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