¡Ahora es el tiempo favorable!

Esta tarde hemos celebrado en el Seminario el Miércoles de Ceniza y el inicio de la Cuaresma. Es el tercer año que vivo éste día en el Seminario y recuerdo lo duro que se me hizo el primer año... Antes de la misa he estado un buen rato en el messeger hablando con unos cuantos amigos de esos de "toda la vida" con quienes he crecido y he vivido: Pedro, Majo, Diana, David, Amanda, Arantxa... y hemos tenido una multiconversación de esas en las cunde el caos y todo el mundo dice cosas... Ha sido divertido... Han surgido algunas preguntillas típicas como "¿es pecado ésto o aquello...?" pero finalmente hemos acabado hablando de la felicidad... Por supuesto, pocos de ellos habrán ido hoy a celebrar el inicio de la cuaresma... pero si bien la fe no es precisamente lo que me une a ellos, quizás si lo es una experiencia de vida fuerte, mi infancia y adolescencia, y mi vida. Y no por ellos son menos importantes en mi vida... y ahora nuestras respectivas vidas nos conducen por senderos distintos... más que la vida, yo creo que es Dios quien se encarga de ello. Junto a ellos está escrita mi historia de salvación y puedo decir bien alto que Jesucristo me da cada día una vida nueva, una forma de vivir distinta... (Jesucristo, mi inseparable vivir...)

Hoy ha celebrado D. Juan, ha sido impresionante. Nos ha invitado ha celebra una cuaresma que no hemos vivido nunca: La cuaresma de 2008, pídiendo la conversión cada día... Yo recordaba mis dos años anteriores y realmente como cambian las cosas! Ahora es el tiempo favorable de la conversión... Y añadía D. Juan "La cuaresma en sí mismo no tiene sentido. Sino que es un tiempo de preparación para llegar a poder vivir la Inocencia Bautismal de la Noche Santa dónde Cristo vence a la Muerte. Es tiempo de aprender a morir, para así resucitar. Aprender a dejar al Hombre viejo a un lado, de preocuparnos por nosotros mísmos, por mis cosas, por mis necesidades, por mis, mis, mis... Es tiempo de dejar a un lado nuestro Yo, para ir adquiriendo el nuevo estilo de vida, el estilo del Hombre Nuevo, el Hombre Nuevo que es Cristo!

Y esto no se consigue de un día para otro... la conducta se cambia desde el corazón; no por uno mismo, no a base de puños... y ha añadido: "¡la conducta se cambia ahí! (señalándonos a nosotros) En esos bancos, ahí sentados, o de rodillas... delante de Jesucristo, pidiendo, contando, hablando, llorando, viviendo... dejándo nuestros propios proyectos, nuestro propio yo, nuestro hombre viejo... y con el corazón puesto en Cristo, el Hombre nuevo... Y a lo largo de este camino Cuaresmal, íremos ayudándonos unos a otros... ¡porque ahora es el tiempo favorable!

¡Que así sea!

(Pie de Foto: Santiago'07)